En Polonia, la Noche de San Juan, también conocida como la Noche de Kupala, trae muchos ritos de origen pagano, característicos de la cultura eslava, por ejemplo, la muy extendida tradición que lleva a las chicas jóvenes a las orillas de ríos y lagos para soltar sobre el agua las coronas de flores. En algunas regiones dentro da las coronas (llamadas wianki) se colocan y encienden las velas. La trayectoria de las coronas y la duración de la llama de las velas sirven para interpretar el futuro. Pero los festejos van mucho más allá, acompañados de una intensa agenda de eventos populares y culturales. Destaca el Festival de Wianki en Cracovia que se suele celebrar durante tres días pero los fuegos artificiales están presentes en no pocas ciudades, salvo en Varsovia que, protegiendo a los animales, los suele sustituir por luces láser.