La región de SILESIA (Śląsk)
La región de Silesia está situada en el sur de Polonia, haciendo frontera con la República Checa y Eslovaquia. Conocida antaño por su potente industria de carbón, hoy es un interesante mosaico de propuestas para el viajero. Su capital, Katowice, está convenientemente situada a poca distancia de Cracovia (70 km por autopista) y a poco más de dos horas en tren desde Varsovia. Conocida como ciudad industrial por excelencia, no se encuentra en las principales rutas turísticas por Polonia pero sí, debido a la existencia de conexiones aéreas de bajo coste a Katowice, puede ser considerada como el punto de partida para explorar la región de Silesia y las regiones vecinas del sur de Polonia.
Katowice está dejando atrás su imagen de ciudad industrial y muchos edificios industriales se están convirtiendo hoy en día en interesantes museos que recuperan la historia y conservan las tradiciones de esta región. Katowice posee una de las mejores salas de conciertos de Europa, sede de la Orquesta de la Radio polaca (NOSPR). Justo al lado se encuentra el polivalente pabellón llamado Spodek, uno de los más innovadores construido en la Polonia „comunista”, que acoge no solamente macro eventos culturales, sino también grandes eventos deportivos y propios de esta nuestra nueva era, como es el Intel Extreme Master que reúne cada febrero a miles de aficionados a videojuegos.
Częstochowa, la capital espiritual de Polonia y lugar de culto mariano y peregrinaciones, está a poco más de 70 km de la capital de Silesia.
Las bien arraigadas tradiciones mineras siguen vivas a través de las tradiciones, cultura, barrios de los mineros y minas que se pueden visitar y, cómo no, a través de su gastronomía; el festival anual Sabores de Silesia (Festiwal Sląskie Smaki) se celebra cada primavera con la participación de numerosos restaurantes fieles a las sabrosas recetas regionales y los amantes de buena y contundente comida.





Entre los monumentos industriales y postindustriales, el más curioso e interesante es la mina de plata, zinc y plomo sita en Tarnowskie Góry, donde el recorrido subterráneo se realiza en barcos debido a que el agua se hizo con los pasillos ya excavados por los mineros. Los interesados en las tradiciones mineras pueden visitar las minas de carbón -llamado oro negro de Polonia- en Zabrze, donde están abiertas al público la Mina Guido y Luiza.
En Silesia, debido a su naturaleza de cuenca minera, se han hecho muchas fortunas, y por tanto no es de extrañar que queden palacios y residencias de magnates. En Pszczyna se visita el palacio de la familia de Hochberg; su última señora fue una aristocrática inglesa llamada la Princesa Daisy, que se casó por amor con uno de los últimos aristócratas de la familia Hochberg. Cuando el amor se apagó, fijó su residencia en el cercano Palacete de Promnice, utilizado como residencia durante las cacerías y hoy día convertido en un precioso hotel con encanto.
Silesia está fuertemente relacionada con la historia de Polonia. Aquí podremos visitar la Ruta de Los Nidos de Águila, que serpentea entre las fortalezas del s. XIV que aseguraban la ruta comercial entre el sur y el norte.
En dirección al sur recomendamos visitar la ciudad de Cieszyn, situada justo en la frontera con la República Checa. Es una sola ciudad, situada geográficamente en dos países. Queda el castillo utilizado por Franz Josef durante la I Guerra Mundial y el pequeño pero precioso casco antiguo, ambos en la parte polaca de la ciudad.
Silesia es también la región de la cerveza: desde aquí se exporta la mundialmente famosa cerveza Żywiec producida en la localidad homónima y la Tyskie que tiene su museo en la localidad de Tychy. La zona de montañas (Beskidy) próxima a Żywiec permite practicar deportes de invierno, incluidos saltos de esquí, o disfrutar de los bosques y lagos durante el resto del año.
El monumento más conocido en Polonia, el Museo Auschwitz – Birkenau que administrativamente pertenece a la vecina región de Małopolska, se encuentra a tan sólo 40 km de Katowice, más cerca que de Cracovia.
Por último, es en Silesia donde se puede encontrar el nacimiento del Vístula, uno de los ríos más largos de Europa.
Descubre más detalles y razones para disfrutar de Silesia en los artículos que publicamos a continuación.